Victoria ha sido elegida especialmente para ser la asistente del príncipe del reino del desierto El Deharia, pero la guarda imperial irrumpe en su cuarto y la saca a rastras con nada más que un negligé puesto. Su padre siempre ha tenido problemas con el juego, pero pensar que esta vez ha hecho trampas jugando contra el Príncipe Kateb… La personalidad del príncipe es tan feroz como la cicatriz de su rostro. La recibió durante su fallido secuestro, en el que dicen que mató a un hombre. Rehusando a la vida de palacio, es conocido por desaparecer durante meses en una aldea del desierto. Victoria odia a su padre, pero no puede romper la promesa que le hizo a su madre antes de morir. Implora al príncipe para que deje libre a su padre, y el príncipe accede…con una condición. ¡Se convertirá en su amante e irá con al a su harem del desierto!